Gliese 581g
¿Cómo se descubre un planeta?
Quizá si diéramos un simple vistazo al cielo durante una noche sin nubes y alejados de la contaminación lumínica, podríamos observar miles de estrellas que como tintineantes luciérnagas decoran con su guirnalda blanquecina el oscuro firmamento, aunque estas pequeñas luces se encuentran a docenas de años luz de nuestro barrio. Pero qué ocurre cuando se trata de un planeta que no puede verse a simple vista ni tampoco desde el más potente telescopio. ¿Cómo pueden los científicos y astrónomos confirmarnos la existencia de algo que no podemos ver?.
La ciencia como religión
Desde hace siglos el pensamiento científico ha despreciado la exactitud de la Biblia desarrollando diferentes teorías sobre el origen del hombre y el universo, sobre prehistoria y futuro.
Cuando la ciencia exponía como hecho indiscutible y aceptado que la Tierra era plana, la Biblia ya enseñaba con mucha anterioridad que nuestro planeta era un círculo. Más de tres mil años antes de que el famoso científico sir Isaac Newton explicara que los planetas están suspendidos en el vacío gracias a la gravedad, la Biblia declaró poéticamente que ‘la tierra está colgando sobre nada’.
(Job 26:7) c. 1473 a.E.C.
7 Él está extendiendo el norte sobre el lugar vacío, colgando la tierra sobre nada;
(Isaías 40:22) 732 a.E.C.
22 Hay Uno que mora por encima del círculo de la tierra, los moradores de la cual son como saltamontes, Aquel que extiende los cielos justamente como una gasa fina, que los despliega como una tienda en la cual morar…,
Sin embargo la pregunta persiste, ¿Cómo pueden los científicos poner su fe en algo que no han visto, darle un nombre con identidad propia [Gliese 581g] y recrear su aspecto mediante desarrolladores informáticos para publicarlo en sus prestigiosas revistas de ciencia?
Para detectar un planeta del tamaño de Gliese 581g necesitamos fijarnos en las ligeras variaciones –casi imperceptibles- que a su paso genera en las líneas espectrales de su estrella, a lo que llaman “tirón gravitacional”.
Un grupo de astrónomos de la Universidad de California Santa Cruz (UCSC) y el Instituto Carnegie de Washington (financiado por la NASA) han llegado a la conclusión de que este es el primer planeta descubierto con características que lo hacen potencialmente habitable.
Añaden además que sea probablemente rocoso y que sus temperaturas oscilen entre los -31ºC y -12ºC. Se estima también que su diámetro es de 1,2 a 1,4 veces el tamaño de nuestro planeta.
La cuestión es esta: los científicos pueden dibujar y representar imágenes fantásticas con su textura, tamaño y densidad de un planeta que no puede verse con los medios modernos de que disponen y en cambio la mayoría de ellos rechazan la idea de que exista un Creador, porque a Dios no lo ha visto nadie.
Hablan de indicios, líneas espectrales o sombras. ¿Y si dijéramos que hay más indicios en todo lo que nos rodea de la existencia de un diseñador, un legislador de constantes universales, un Dios y Creador con propósito que de la existencia de un planeta a 20 años luz por la impresión que causan unas sombras?.
Imaginemos que durante un paseo por el campo encontramos una hermosa casa, ¿pensaríamos que ha surgido sola de la nada, como si hubiera crecido del suelo por sí misma?
(Hebreos 3:4) 4 Por supuesto, toda casa es construida por alguien, pero el que ha construido todas las cosas es Dios.
Una sola frase, una sola enseñanza registrada en la Biblia podría cambiar al mundo:
(Mateo 19:19) . . .Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo”. . .
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